Un Imperio de Libros envolvió la biblioteca de nuestro centro de la mano de su librera, Mamen Monsoriu. Bajo el título Ser librera es fashion nuestro alumnado pudo conocer en primera persona la historia de una joven valenciana que, tras licenciarse y trabajar en Biotecnología, acabó dejándolo todo por un sueño muy quijotesco: montar su propia librería.
A través de su vivencia pudimos conocer todo el proceso que supone traducir una vocación en un negocio propio. Desde buscar el local de alquiler, pasando por contactar con instancias públicas para el asesoramiento y apoyo económico, hasta conseguir la última parte de financiación a través de crowfunding o superar la pandemia gracias a campañas llenas de creatividad o su actual fase en plena obra de ampliación del local tras cumplir los cuatro años de vida.
Más allá del aspecto puramente empresarial -la parte cerebral de esta ecuación, Mamen Monsoriu nos introdujo en el proceso de creación literaria, su verdadero corazón. Desde sus rutinas para escribir, diferentes en su caso si se trata de poesía –mucho más emocional y explosiva- o de narrativa –que requiere más planificación y concentración-, a cómo agendar diariamente tiempo personal para escribir, aunque ello implique levantarse antes de que salga el sol o renunciar a planes sociales.
Asimismo, la conversación versó sobre los géneros literarios más demandados entre el público juvenil (novelas de misterio, romántica, manga…), nuevas propuestas como el conocido como cozy mistery –especie de novela negra más suave-, el fenómeno de los instapoetas o la relevancia de contar también con un espacio para los libros de lectura fácil –aquellos cuyos textos se adaptan a personas con mayor dificultad lectora-.
Respecto a la relación especial que se crea entre librera y lectores, explicó la importancia de conocer los gustos de sus clientes para poder recomendarles los títulos que más se adaptan a su inclinación personal o momento vital. Y es que Mamen Monsoriu prescribe libros para el alma.
La librería el Imperio de los Libros –como tantas otras-, supera el concepto de tienda de libros, alzándose en el entorno urbanita como un auténtico punto de dinamización cultural. Presentación de libros, cuentacuentos, talleres de escritura, veladas poéticas, sin olvidar, los clubs de lectura. Estos últimos se encuentran en los últimos años en pleno auge, creando auténticas comunidades lectoras que disfrutan de la literatura compartida.
La pasión transmitida por esta librera, poetisa, novelista y correctora prendió en los ojos atentos de nuestro alumnado, quienes trasladaron sus preguntas y no dudaron en compartir sus últimas lecturas, sus obras preferidas, sus poetas de referencia o sus inquietudes escritoras, incluso en algún caso con el regalo de un texto propio.
A contracorriente de los demoledores datos del último informe Pisa, donde España retrocede tres puntos en comprensión lectora, descubrimos entre nuestros alumnos asistentes el germen de grandes lectores, autores en potencia, futuras libreras, empresarias de bibliocafés y poetas. Porque las aulas del Andreu Alfaro están pobladas de quijotescos alumnos. Alumnos que más que frikis, son fashion.
Éxito de público y respaldo del AMPA
A pesar de la imposibilidad que implica hacer coincidir en un mismo horario al personal del centro, en este enero pleno de actividades (viaje a la nieve, visita a la Feria de la Orientación, velada poética, las propias sesiones de las clases) la presentación de Mamen Monsoriu en la biblioteca completó todo el aforo.
Contó con el respaldo de la directiva, de profesores interesados de diversas materias y alumnos de diferentes cursos, así como del presidente del AMPA, Rafael Ramos, quien aprovechó una ocasión tan especial para realizar la donación de una nueva obra que se suma al catálogo de la biblioteca, la novela gráfica de Persépolis.
Biblioteca Alexandria del IES Andreu Alfaro
Este encuentro se enmarca dentro de las actividades de dinamización de nuestra biblioteca, apellidada Alexandria, y que se suma a otras iniciativas desarrolladas este curso como las constelaciones lectoras, el concurso de relatos de micropesadillas, o el trabajo que se está desarrollando de digitalización de los archivos.
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